Poco a poco y sin que casi nos demos cuenta, se acerca la Navidad. Este año, aunque la viviremos de otra forma, no faltará una mesa a la que se sentará nuestra familia y sobre la que colocaremos manjares que solo se disfrutan una vez al año.
Como cada año, las bandejas se colocarán como un puzle sobre el mantel reservado para ocasiones especiales. Y muchas de ellas, serán de pizarra. Sobre todo en nuestra tierra, donde se hará gala de lo nuestro, pero también en muchas partes de España y de Europa, donde las exportamos. Porque cada año, la demanda de este tipo de producto crece de forma exponencial.
Y cada año, las exigencias son mayores. De las formas rectas o circulares más sencillas, hemos pasado a composiciones más complicadas, sin restar elegancia a la presentación de cada plato. El postre que hicimos juntos o los canapés para abrir boca, este año también se llevarán a la mesa en bandeja, y será mucho mejor si es de pizarra.